Un noviembre de hace años me encontré segregando serotonina por una página Web, y no era meetic, no me había enamorado por Internet, sino que estaba descubriendo la lírica íntima de un escritor que publica por la red.
Aquella fiesta de mis neurotransmisores me llevarían hasta hoy, y cambiaría mi manera de hacer, de ser, de leer, incluso de pensar, descubrí el mundo de los blogs, y así fui descubriendo esta nueva manera de vivir, de despertarme esperando que alguno de vosotros hubiese vomitado sentimientos, opinión o vivencias al mundo.
Pues como homenaje a todos pero en especial a J.S de dicha segregación me he propuesto aprender a escribir, a plasmar mis sentimientos en la maquinita (como le llamaba Carmen al principio), con la esperanza de leer dentro de unos años y ver una evolución en mi escritura, en la expresíón, el vocabulario, en los temas, en el tiempo invertido en escribir un post, y quizás, hasta quién sabe si acabar atreviéndome con la poesía, hoy por hoy a años luz.
Creo que se lo debo, ya no sólo por todo lo que me enseña a diario, sino por aguantar mis infinitas muletillas y no soltarme un : "A ver si hablamos bien, coño!!" así, con voz de Umbral. Por recibir mis patadas al diccionario y no devolverme un crochet. Por todo esto y por provocar a mi serotonina sin pedir nada a cambio le debo este esfuerzo.
Hoy será él quien tenga el desayuno en forma de post, y no sabéis la ilusión que me hace, saps?
No sería por un serfidor no??
ResponderEliminarJejijajojojo
Ya está aquí la totalidad total, la brutalidad de mis dos! lectoras que tiene mi obra. Guau
Bueno, aquí, a las tres de la madrugada,
ResponderEliminarcomo una romántica empedernida,
no sé si con comillas o sin ellas,
y después de aparcar el coche,
escribo.
Y a J.S. le digo que ha hecho muy bien en animarte y, sobre todo, en quererte.
Y que tiene dos lectoras fantásticas y con criterio probado , de las que " al pan pan y al vino vino" . Y eso está requetebién...